Cada sesión es única y personalizada, se hace un estaje con un biotensor o péndulo para detectar qué arquetipos
geométricos-cromáticos son los adecuados. Se colocan unas láminas translúcidas (con geometrías y colores
específicos) sobre el cuerpo o alrededor del campo energético del cliente. Se proyecta una luz (como un flas) sobre
las láminas que permite que el color y la forma actué sobre el cuerpo del cliente, que estará acostado en una camilla
y en estado de relajación. Se dejan actuar sobre unos 40 minutos más o menos las láminas para que la vibración
introducida a través de la luz, reordene las memorias inconscientes, desbloqueen emociones y organicen diferentes
cuerpos, el físico, mental emocional y espiritual.
Al final de la sesión se comparte que arquetipos has salido para el cliente, su significado y como ha sido el trabajo
con él o ella.
Se suelen compartir pautas para reflexionar los días siguientes a la sesión.
